Más de un millón de peregrinos llegan hasta Bagdad. Los visitantes se congregaron alrededor del santuario dedicado al imán Musssa al Kadhem, venerado por los musulmanes chiítas.
Al menos un millón de peregrinos se reunieron en Bagdad alrededor del santuario dedicado al imán Musssa al Kadhem, venerado por los musulmanes chiítas. Los congregados llevaron a cabo rituales golpeándose la cabeza con las manos y bailando en círculos para recordar al séptimo imán chiíta que vivió en el siglo VIII. Hoy se alcanzó el mayor número de visitantes en el santuario, por lo que miles de efectivos de las fuerzas de seguridad fueron desplegados en el área, con el apoyo de soldados estadounidenses, en medio de un reforzado despliegue de seguridad tras los ataques a peregrinos que tuvieron lugar en los últimos díoas en Kazimiyah. Mientras tanto, un equipo de mujeres de las fuerzas de seguridad fue desplegado por primera vez para registrar a mujeres.
Ante el temor a nuevos atentados, las autoridades han impuesto el toque de queda prohibiendo la circulación de vehículos en la capital, que espera recibir durante la jornada de hoy a alrededor de un millón de personas para conmemorar a uno de los 12 imanes de la confesión chií. Alrededor del templo ya se habían instalado centenares de tenderetes, donde se ofrece agua y comida a los peregrinos que llegan, en la mayoría de los casos a pie, desde todas partes del país.
Aquí, tropas imperiales en la batalla de Faluya, la última gran incursión militar contra la resistencia.
Tropas iraquíes y estadounidenses lanzan una gran ofensiva en Diyala. La operación en la conflictiva provincia multiétnica es la de mayor envergadura desde la caída de Sadam Huseim.
El Ejército iraquí, con el apoyo de tropas estadounidenses, han lanzado una ofensiva militar a gran escala contra rebeldes en la conflictiva provincia de Diyala, al este de Irak, donde conviven insurgentes chiíes, suníes y otros grupos étnicos. El general Mohamed al Askari ha confirmado a la televisión oficial iraquí Al Iraqiya el comienzo de la operación, denominada Buenos Presagios, en esta provincia multiétnica, que sufre uno de los mayores niveles de violencia de todo Irak. Diyala, junto a la frontera con Irán, se ha convertido en uno de los principales feudos de los islamistas suníes de Al Qaeda y es escenario de sangrientos atentados suicida. Sólo este mes, terroristas suicidas se han cobrado la vida de 27 personas en la capital provincial, Baquba, a 65 kilómetros al noreste de Bagdad.
Askari no ha ofrecido más detalles sobre el dispositivo militar, aunque según una información publicada hace dos días por el diario oficialista Al Sabah, más de 50.000 unidades del Ejército y de la Policía iraquíes pueden estar participando en la operación. De acuerdo con el rotativo, que citaba fuentes de la seguridad iraquí, el dispositivo es el de mayor envergadura que se lanza en el país desde la caída del régimen del dictador Sadam Husein, en 2003. «La operación «Buenos presagios» es una operación dirigida, planificada y ejecutada por las fuerzas iraquíes. Las fuerzas de la coalición multinacional proporcionarán consejos, asistencia y apoyo, a instancias de los iraquíes», puntualizó un comunicado de la Fuerza Multinacional en Irak. «El objetivo de la operación es descubrir y destruir a los elementos criminales y las amenazas terroristas en Diyala, y eliminar las redes de contrabando en la región. La operación alcanzará «todas las áreas» de la provincia, ubicada junto a la frontera con Irán.
Dicho y hecho, los atentados espectaculares han comenzado. Tres mujeres suicidas causan al menos 24 muertos en el centro de Bagdad.
Al menos 24 personas han muerto y más de 70 han resultado heridas después de que tres mujeres suicidas hicieran estallar la carga que llevaban adosada a su cuerpo en el centro de Bagdad, informaron fuentes policiales. Al Quaeda utiliza cada vez más mujeres en sus acciones terroristas porque ellas pueden pasar mejor los controles de seguridad. Las explosiones se produjeron cuando peregrinos chiíes caminaban cerca del Teatro Nacional de Irak, en el barrio de Karrada, rumbo al distrito de Kazamiya, al norte de la capital, donde iban a participar en las conmemoraciones anuales por la muerte del imán Musa Al Kazem.
Las fuentes señalaron que muchos de los heridos, entre ellos mujeres y niños, se encuentran en estado grave, y explicaron que los tres estallidos se produjeron en un intervalo de pocos minutos.
Estas celebraciones atraen cada año a decenas de miles de fieles hasta el barrio de Kazamiya, donde Musa Al Kazem, séptimo de los 12 imanes del chiísmo, fue enterrado tras su fallecimiento.
Con motivo de la llegada masiva de peregrinos se han impuesto extraordinarias medidas de seguridad en esta zona de la capital ante el temor a que se produzcan ataques terroristas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario